Una inmobiliaria es una empresa dedicada a la construcción, venta, alquiler y administración de viviendas; no obstante, lo más habitual es que las agencias se dediquen a la venta y alquiler de propiedades. En función de las actividades que cubran, los trabajadores de inmobiliarias deberán promocionar las propuestas y realizar las gestiones correspondientes, de las que obtienen una comisión.
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Trabajos y funciones
Agente Inmobiliario: Los agentes inmobiliarios son las personas físicas o jurídicas que se dedican a prestar servicios de asesoramiento, gestión y mediación en transacciones con inmuebles. Por ejemplo: compraventa, alquiler, permuta o cesión de estos bienes. Para poder emplearse como agente es necesario figurar en el Registro de Agentes Inmobiliarios; además de tener un gran conocimiento del mercado inmobiliario y la legalidad.
Comercial Inmobiliario: Trabajar en una inmobiliaria a veces exige especializarse y los comerciales son agentes inmobiliarios tienen su área en el trato con los clientes y la realización de visitas a los inmuebles, lo que representa el mayor volumen del trabajo en una inmobiliaria. Estos profesionales acostumbran a desarrollar una cartera de clientes que arrastran cuando cambian de compañía, por lo que son un gran activo en cuanto a generar movimiento en la empresa.
Negociador Inmobiliario: Los negociadores están especializados en cerrar los tratos entre los clientes de la empresa, siendo unos grandes conocedores de las técnicas de venta. En grandes inmobiliarias, estos trabajadores ejercen el rol de mediador entre dos partes para buscar un beneficio mutuo, así como la forma de compensar ambas partes, para que todos los implicados queden satisfechos al cerrar el trato.
Administrador de fincas: Las empresas inmobiliarias también pueden dedicar su actividad a la administración de viviendas, para lo que pueden tener un agente especializado. Este profesional se encarga de gestión, conservación y mantenimiento de los inmuebles alquilados en nombre del propietario; pudiendo llegar a ejercer el rol de mediador en caso de conflicto.
Qué estudiar para trabajar en una inmobiliaria
Si te preguntas cómo trabajar en una inmobiliaria como agente o con un perfil especializado, el primer paso es tener una formación en el ámbito comercial, ya que no existe una titulación específica en el sector. Los estudios FP de Grado Medio en Técnico de actividades comerciales y de Grado Superior en Gestión de Ventas y Espacios Comerciales son la base sobre la que construir una carrera en el sector inmobiliario.
Sin embargo, son los cursos inmobiliaria los que te aportarán los conocimientos necesarios para poder empezar tu carrera laboral en este sector. Se trata de enseñanzas no regladas donde se imparten los conocimientos técnicos y legales para poder ejercer una profesión en una inmobiliaria o para poner en marcha una empresa propia. No obstante, serán los años de experiencia los que acabarán formando a los empleados de una agencia como auténticos profesionales.
Requisitos para trabajar en una inmobiliaria
Los requisitos para poder ejercer como agente inmobiliario en España han cambiado en los últimos años, siendo innecesario estar colegiado, haber superado un examen o tener una titulación en el sector. A día de hoy, tan sólo se exige figurar en el Registro de Agentes Inmobiliarios para poder ejercer como profesional en el sector inmobiliario.
Para iniciar un negocio propio, los agentes deberán cumplir con la regulación del sector y disponer de un seguro civil de responsabilidad entre otros requisitos para disponer de una empresa. Por otro lado, ser agente inmobiliario comercial y querer trabajar cuenta propia exige estar dado de alta como autónomo y disponer de una buena cartera de clientes para poder acordar comisiones por transacción en aquellas agencias donde colaboren.
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